El sugaring o cera de azúcar es ideal para arrancar el vello corto. Es menos dolorosa que la cera convencional y tan duradera como esta

Cera, cremas, cuchilla, máquina… ¿sabías que hay una alternativa natural y económica para depilarte? Sólo necesitas azúcar y limón, por lo que la puedes preparar en tu casa y de una manera muy sencilla.

Te explicamos cómo preparar y aplicar esta técnica natural conocida como Sugaring, así como sus ventajas respecto a los otros métodos de depilación.

¿Qué es el Sugaring?

El Sugaring es un método de depilación usado desde la antigüedad en el Antiguo Egipto y en otros países orientales, y para la cual sólo necesitamos azúcar y limón. El método es parecido al de la cera, pero tiene incluso más ventajas, como explicaremos en este artículo.      

Actualmente, en algunos países venden ya preparada la pasta de azúcar, aunque es tan sencilla que nos conviene aprender a prepararla nosotras mismas. Rápidamente aprenderemos a hacerlo sin dificultad y ya no querremos ningún otro método de depilación que no sea éste.

¿Qué necesitamos?

Los únicos ingredientes que necesitas son:

·         2 tazas de azúcar

·         El jugo de 1 limón amarillo

·         Agua 

¿Cómo lo preparamos?

1.   Pondremos el jugo de un limón y las dos tazas de azúcar en una cazuela u olla mediana. El jugo debe cubrir completamente el polvo, ya que si no deberemos añadirle un poco de agua hasta que lo cubra.

2.   Calentaremos esta mezcla a fuego medio-alto, revolviendo con una cuchara de madera hasta que el azúcar se haya disuelto completamente. Si tenemos un termómetro de cocina podemos comprobar que la mezcla alcance los 115 grados centígrados.

3.   Cuando empiece a hervir bajaremos bastante el fuego y esperaremos a que se haga una pasta más espesa y pegajosa pero manejable, de color dorado suave, como si fuera miel. Si tiene un color oscuro posiblemente se nos ha quemado y deberemos volver a hacerlo. En ningún caso dejaremos que hierva a fuego alto durante más de un minuto.

4.   Retiraremos del fuego y dejaremos enfriar.

5.   Ya tenemos lista nuestra cera de azúcar.

¿Cómo lo aplicamos?

Opcional mente podemos realizar una exfoliación antes de la depilación, aunque esto no se recomienda si tenemos la piel muy sensible.

Por otro lado, para que no se adhiera demasiado la cera de azúcar a la piel podemos poner un poco de polvo de talco en la zona a depilar.

1.   Limpiaremos y secaremos bien la zona que vayamos a depilar para que la cera de azúcar no tenga problemas para pegarse.

2.   Nos lavaremos bien las manos y, opcional mente, las untaremos con un poco de aceite. Cogeremos un poco de cera y la untaremos en el sentido contrario al crecimiento de vello. Por ejemplo, si lo aplicamos en las piernas, como el vello crece de arriba hacia abajo, la cera la aplicaremos de abajo hacia arriba.

3.   Si notamos que la cera está muy espesa, éste es el momento de calentarla un poco.

4.   Repartiremos bien la cera para que quede una capa delgada y sin esperar, tiraremos de ella en la dirección contraria, es decir, en el sentido del crecimiento del vello (si hacemos las piernas será de arriba hacia abajo).

5.   Nos ayudará tensar un poco la piel con la ayuda de la otra mano.

6.   A continuación, la misma pasta, que se va despegando con facilidad, la untaremos en otra zona y repetiremos el proceso.

7.   Al finalizar, aplicaremos un poco de crema hidratante o gel de aloe vera para calmar la piel. Si han quedado restos de la cera lavaremos con agua tibia.

Ventajas de esta depilación

·         Es económica, ya que sólo necesitamos azúcar y limón

·         Es tan duradera como la cera

·         Es menos dolorosa que la cera

·         Sirve también para el vello muy corto

·         Se usa a temperatura ambiental

·         Nos ayuda también a eliminar las células muertas de la piel y a potenciar su regeneración

·         No contiene sustancias artificiales

·         Se puede usar en cualquier parte del cuerpo

Recomendaciones

·         Si es la primera vez que pruebas este sistema, hazlo primero en una zona pequeña y poco sensible de tu piel.

·         La cera de azúcar no tiene que estar caliente, sino tibia.